domingo, 10 de marzo de 2013

Demasiado sin asidero razonable



Conciencia y memoria: continuidad. Y esperanza. Y ha sido en la poesía como se ha mostrado, porque demasiado profunda y tímida, demasiado reservada, demasiado sin asidero razonable, apenas nadie le hubiese dado crédito. El pensamiento necesita razones más positivas, más hechas para acoger a algo dentro de sí, mientras que la poesía tiene por vocación acudir a cantar lo que nace. Y lo que nace sobre todo, en contradicción y a despecho de lo que le rodea. La poesía exige menos y ofrece más que el pensamiento; su esencia es su propia generosidad. (…)

La palabra es la luz de la sangre.



Zambrano. Pensamiento y poesía en la vida española. Ed. Biblioteca Nueva, Madrid, 2004

No hay comentarios:

Publicar un comentario