viernes, 26 de octubre de 2012

El guión estaba en sol



El director Basilio Martín Patino en la madrileña Puerta del Sol, ocupada por los miembros del movimiento 15M. / DAVID PANIZO


Libre te quiero es el primer trabajo que Martín Patino lleva a cabo sin guion previo. “El guion estaba en Sol”, señala frente a una pantalla y un par de ordenadores en la sala donde se ultima el montaje de este gran retrato de lo que el director califica de “renovación”. “Es un fenómeno social nuevo que yo no he conocido. Dicen que en la II República sí se vivieron situaciones parecidas, pero a mí me sorprendió esa fiesta y esa alegría en las calles. Yo nunca he visto una manifestación tan gozosa. Era otra España, algo nuevo estaba sucediendo. Este país necesitaba esas dosis de alegría”.
No habrá voces en off ni un discurso narrativo. De las 25 horas más o menos que rodaron, Libre te quiero se quedará en poco más de una. 
La música será la de las bandas y grupos que poblaron de sonidos aquellos días, además de la canción Libre te quiero que interpreta Amancio Prada: Libre te quiero / como arroyo que brinca / de peña en peña / Pero no mía. Cuando suena la canción en el ordenador Martín Patino sonríe: “En ningún rodaje he sido tan feliz como en este.
A sus 81 años, el director de títulos tan emblemáticos del cine español como Nueve cartas a Berta, Canciones para después de una guerra o Queridísimos verdugos, ha presentado hoy en la Seminci de Valladolid, fuera de concurso en la sección Tiempo de Historia, un emocionante documental, Libre te quiero, donde rescata la felicidad que se vivió en la plaza madrileña en torno al 15-M en 2011 y sitúa en la memoria colectiva este movimiento que “liberó la imaginación de millones de personas en el mundo”. “Fue una reacción hermosa y espontánea de la sociedad. Una conmoción colectiva, una fiesta”, aseguraba Martín Patino, bastón en mano, tras la proyección del documental, que contó con la actuación en directo de Amancio Prada, interpretando la canción que da título al trabajo con letra de Agustín García Calvo. “Libre te quiero / como arroyo que brinca / de peña en peña / pero no mía”. Al final, Prada dijo: “Con esta película se recupera la esperanza”. La música de Libre te quiero ha inundado la sala llena del teatro Zorrilla, donde previamente se proyectó otro trabajo sobre el movimiento que nació en Madrid en mayo del año pasado, Ensayo de una revolución, dirigido por los gaditanos Pedro Sara y Antonio Labajo, que narra la acampada en la plaza de los Palilleros de Cádiz y los deseos de cambio que durante esos días vagaron por tantos rincones de España.




El País

1 comentario:

  1. Gracias, Basilio. La vida se empeña en restituirnos la esperanza. La juventud construye, no se cansa de construir la alegría. El paisanaje de mirada limpia capta, reconstruye y crea, en diversos lenguajes, contra la muerte.
    Gracias.

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